La erudición, la fuerza intelectual y la capacidad para la síntesis de Mircea Eliade dan como resultado una visión de las creencias religiosas que, según su propia fórmula, arroja simultáneamente luz sobre "la unidad fundamental de los fenómenos religiosos y la inabarcable variedad de sus expresiones".
Es sorprendente cómo de un pensamiento mágico basado en ritos sencillos que dan sentido a la existencia diaria, se va pasando a una sofisticación cada vez más elaborada a medida que los pueblos van desarrollándose históricamente: el paso del paleolítico al neolítico, los estados agrícolas y ganaderos, las primeras civilizaciones… van entretejiendo un sistema de creencias complejísimo que se adapta a cada situación histórica de los seres humanos de cada momento histórico.
El primer tomo nos muestra desde las primeras manifestaciones mágico-religiosas de los hombres y las mujeres prehistóricos hasta la difusión del culto a Dionisos, pasando por las religiones de Mesopotamia y del antiguo Egipto, la de Israel, la de los indoeuropeos, las de la India antes de Buda, la griega y la iraní.
El segundo tomo está en gran parte dedicado a las religiones de la antigua China, al budismo y al nacimiento del cristianismo, aunque habla igualmente del bramanismo y el hinduismo, la religión romana, los celtas y los tracios, Orfeo y Pitágoras, la síntesis hinduista, el judaísmo, el paganismo, el sincretismo y la época helenística.
El tercer tomo prosigue, desde san Agustín hasta la Ilustración, la historia de las iglesias cristianas iniciada en el volumen precedente. Estudia igualmente a Mahoma y la aparición del Islam, y consagra largos capítulos a las místicas judía, cristiana y musulmana. Para finalizar, aborda también las herejías, las prácticas populares y el esoterismo, añadiendo algunos capítulos dedicados a las religiones euroasiáticas y tibetanas.
Las creencias e ideas religiosas tratan de explicarlo todo: el origen del universo, la creación del ser humano, el sentido de la vida, lo que hay más allá de la muerte, el comportamiento correcto, la existencia del bien y del mal, la salvación divina, el significado del tiempo y cualquier tema relacionado con la vida o la muerte.
El primer tomo nos muestra desde las primeras manifestaciones mágico-religiosas de los hombres y las mujeres prehistóricos hasta la difusión del culto a Dionisos, pasando por las religiones de Mesopotamia y del antiguo Egipto, la de Israel, la de los indoeuropeos, las de la India antes de Buda, la griega y la iraní.
El tercer tomo prosigue, desde san Agustín hasta la Ilustración, la historia de las iglesias cristianas iniciada en el volumen precedente. Estudia igualmente a Mahoma y la aparición del Islam, y consagra largos capítulos a las místicas judía, cristiana y musulmana. Para finalizar, aborda también las herejías, las prácticas populares y el esoterismo, añadiendo algunos capítulos dedicados a las religiones euroasiáticas y tibetanas.
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